Colección: Cuadros de Colores Tierra

La amplia gama de tonos ocres, también conocidos como "colores tierra", están muy presentes en la naturaleza. Son pigmentos muy neutros, que simbolizan lo acogedor y rústico, dan sensación de estabilidad, calidez y confort. Un escenario típicamente color ocre es el otoñal: Las hojas de los árboles se secan progresivamente creando una rica variedad de tonos.

Los marrones se incluyen dentro de esta categoría y tienen diferentes nombres: Café, camel o beige según la saturación que contenga el color. La misión de este tono es la de crear una base o fondo para conseguir resaltar otros colores más vivos, como el azul o el amarillo.

De hecho, es raro ver un óleo compuesto únicamente de ocres. Es frecuente verlo combinado con colores cálidos como el rojo, amarillo o naranja. También lo puedes encontrar junto con tonos fríos como el turquesa o el verde pálido.

En resumen decimos que los colores tierra son neutros, y forman una base perfecta para ceder el protagonismo a colores saturados. Funcionan igual que la textura de un cuadro: es un elemento muy sutil que termina de redondear el diseño, creando formas orgánicas que recuerdan lo natural.